DEFINICIÓN

Violencia de pareja contra la mujer.

Introducción:Las Naciones Unidas definen la violencia contra la mujer como «todo acto de violencia de género que resulte, o pueda tener como resultado un daño físico, sexual o psicológico para la mujer, inclusive las amenazas de tales actos, la coacción o la privación arbitraria de libertad, tanto si se producen en la vida pública como en la privada»

la violencia de pareja contra la mujer puede manifestarse de formas diferentes:
● violencia física→ se manifiesta en todas las agresiones que atentan contra el cuerpo de una persona, ya sea a través de golpes, lanzamiento de objetos, encierro, sacudidas o estrujones, entre otras conductas que puedan ocasionar daños físicos.
● violencia sexual→ Toda acción que amenaza o viola el derecho de una mujer a decidir sobre su sexualidad y abarca cualquier forma de contacto sexual. La violencia sexual no se limita a forzar a una mujer contra su voluntad, sino a cualquier tipo de acoso, explotación, abuso o intimidación, sin importar si se da dentro o fuera del matrimonio o de cualquier relación.
● violencia psicológica→ Es toda acción u omisión destinada a degradar o controlar las acciones, comportamientos, creencias y decisiones de otras personas por medio de intimidación, manipulación, amenaza, humillación, aislamiento, o cualquier conducta que implique un perjuicio en la salud psicológica. Este tipo de violencia es de las más comunes y naturalizadas de la sociedad, por lo que es necesario aprender a reconocerla y denunciarla.

CAUSAS

Según la ASOCIACIÓN PSICOLÓGICA AMERICANA la violencia contra la mujer tiene múltiples causas donde enfatiza que la violencia contra la mujer es una conducta “aprendida” que se ha forjado por las normas socioculturales y las expectativas de rol que apoyan la subordinación femenina y perpetúan la violencia masculina (American Psycological Asociation, 1999).

La etiología de la violencia doméstica es compleja y multifactorial:

● Desigualdades de género
● Condiciones sociales
● Relaciones conyugales
● Conflictos familiares (violencia en la familia)
● Personalidad

PSICOPATOLOGÍA DEL AGRESOR

son diversos los factores que pueden explicar la conducta del agresor

Características del agresor
● Posesivo
● Impulsivo
● Excesivamente celoso
● Fácilmente irritable
● Tienen cambios bruscos de humor
● Cree que la mujer está subordinada al hombre
● Culpa a otros de sus problemas

Factores de riesgo

factores de riesgo de ser un hombre maltratador, enfatizando el peso de los factores ambientales.

Factores asociados a la perpetración de la violencia doméstica

● Factores psicológicos→ Aceptan igualmente de mejor grado la violencia en una relación de pareja.
● Factores psicopatológicos→ en este caso el agresor puede presentar diferentes tipos de trastornos y depresión.
● Factores neurológicos→ hay estudios sobre la relación entre historia de daño cerebral y conducta violenta en la pareja.

PSICOPATOLOGÍA DE LA VÍCTIMA

Evidentemente para que el ciclo de la violencia se mantenga estable en el tiempo deben aparecer una serie de factores que posibiliten la victimización. En este sentido, Hotaling y Sugarman (1986) encuentran que, de todos los factores considerados relevantes, el que mejor parece predecir la posibilidad de ser una esposa maltratada es el haber sido testigo de malos tratos en la familia de origen durante la niñez o la adolescencia.

Con este dato, Kyriacou y Anglin (1999) destacan este factor explicativo fundamental en su listado de factores de riesgo de ser una mujer maltratada:

No todos los estudios lo valoran de la misma manera por ejemplo: El trabajo de Riggs, Caulfield y Street (2000),analiza este y otros factores asociados a la victimización en la violencia doméstica, aportando los siguientes datos:

1) Experiencia previa de violencia: Haber observado violencia en la familia ,La experiencia de victimización en la niñez, experiencias de violencia durante el noviazgo.
2) Abuso de sustancias: Consumo de alcohol y drogas por parte de la víctima.
3) Psicopatología: Principales consecuencias son el Trastorno de Estrés Postraumático (TEP), depresión, trastorno de ansiedad generalizada, trastorno obsesivo compulsivo, trastornos de la alimentación y abuso de substancias.

Diapositiva de modelos explicativos


MODELOS EXPLICATIVOS PSICOPATOLOGICOS

Existe una gran variedad de modelos explicativos que desde los enfoques más diversos, han tratado de desentrañar los aspectos ligados al origen y mantenimiento de la violencia doméstica. Por citar unos pocos el feminismo, énfatiza en el rol que adopta la mujer en la sociedad; el psicodinámico, aspectos traumáticos de la unión de pareja; el aprendizaje social, análisis de costes y beneficios, entre otros muchos. En este documento vamos a centrarnos en dos conceptos a nuestro parecer más relevantes desde el planteamiento del que partimos.

• MODELO INTERACTIVO DE LA VIOLENCIA DOMÉSTICA

Stith y Rosen (1992)

Este modelo presenta la exploración pormenorizada de los factores multicausales implicados en la violencia doméstica.

- Factores de vulnerabilidad de la familia y el individuo
- Factores de estrés situacional
- Recursos individuales para hacerles frente
- Contexto sociocultural en que se inserta el individuo

Los valores socioculturales relacionados con la violencia y los roles sexuales van a incidir sobre las vulnerabilidades, factores de estrés y recursos disponibles, así como sobre la definición y percepción de la violencia. Una vez que la violencia ha sido empleada de forma funcional, se genera una tendencia, es decir, se repetira a corto, mediano o largo plazo.

Contexto sociocultural

Es el conjunto de valores y normas compartidas por las familias de una misma comunidad y cultura.

1. Aceptación de la violencia: el modelo trasmitido por los medios de comunicación va a influir en las creencias personales, perpetuando la visión de la violencia como una manera adecuada de resolución de conflictos.

2. Estatus subordinado de la mujer: los valores culturales respecto a los roles de género pueden influir en la perpetración de la violencia doméstica, concediendo mayor valor a los hombres que a las mujeres, con lo que estos pueden interpretar que tienen derecho a maltratar a sus parejas, y estas consideren este hecho como algo de menor importancia que el cuidado de su pareja e hijos.

Factores de vulnerabilidad

- Experiencias de socialización: la exposición a la violencia incrementaría la posibilidad de que reaparezca en la siguiente generación
- Características individuales: al interactuar con el estrés situacional

- Ser violento:

− Percepción de escaso poder.
− Actuar de manera posesiva.
− Tener baja autoestima.
− Carecer de mecanismos de afrontamiento.
− Padecer dependencia de sustancias.

- Características de la familia nuclear: la calidad de la relación de pareja (que esta funcione mejor o peor).

Factores de estrés

- Estrés impredecible: modificaciones en el estilo de vida familiar que no pueden anticiparse.
- Acontecimiento desencadenantes: sucesos propiciatorios del comportamiento violento, como que la comida no este bien hecha o haber discutido con su jefe en el trabajo.
- Recursos:

− Personales: basados en la categorización McCubbin y Figley, se enumeran cuatro componentes: Bienestar económico, nivel educativo, estado de salud y categorías psicológicas o de personalidad.
− Sistema familiar: aspectos como la cohesión familiar, la adaptabilidad, la correcta comunicación o el equilibrio de poder en la pareja.
− Red social: el apoyo social es un recurso fundamental a la hora de enfrentarse a dificultades de cualquier tipo.

• MODELOS DE LOS MECANISMOS PSICOLÓGICOS DE LA VIOLENCIA EN EL HOGAR

En la conducta violenta según Echeburúa y Fernández Montalvo (1998), intervienen los siguientes aspectos psicológicos: actitudes de hostilidad, estado emocional de ira, repertorio pobre de conductas y trastornos de la personalidad, factores precipitantes, percepción de vulnerabilidad de la víctima y reforzamiento de las conductas violentas previas.

Actitudes de hostilidad

Derivada de actitudes y sentimientos negativos fundamentados en una evaluación negativa de las conductas de la pareja, así como de estereotipos machistas, percepción de indefensión de la víctima, celos patológicos del agresor y de la creencia en la legitimidad del uso de la violencia para la resolución de conflictos.

Estado emocional de ira

Facilitado por pensamientos activadores que guardan relación con recuerdos de situaciones negativas del pasado de la pareja.

Repertorio pobre de conductas y trastornos de la personalidad

Déficit de habilidades de comunicación y de solución de problemas que dificulta la adecuada resolución de los conflictos.

Factores precipitantes

El consumo de alcohol o drogas puede ayudar a la aparición de conductas violentas, dada su frecuente interactuación con los problemas de la vida diaria.

Percepción de vulnerabilidad de la víctima

Descarga en quién se percibe como más vulnerable ante la ausencia de respuestas de protección enérgicas.

Reforzamiento de las conductas violentas previas

Si las conductas violentas previas han sido eficaces el agresor concluye que es un buen método para conseguir sus fines, del mismo modo, la conducta de sumisión de la víctima se ve reforzada por la evitación de peores consecuencias que las ya padecidas.

• CONCLUSIONES

Los modelos presentados tienen en cuenta ciertos factores del agresor que se han mostrado consistentemente como útiles para predecir la violencia doméstica, tales como un elevado nivel de hostilidad, aceptación de la violencia como mecanismo valido en la resolución de conflictos, escasez en habilidades de comunicación o presencia de abuso de substancias, si bien no se muestran coincidentes en la denominación ni en el peso relativo otorgado a cada uno de estos componentes.

diapositiva consecuencias:


CONSECUENCIAS DE LA VICTIMA

Según la American Psychological Association (1999) la violencia doméstica pasa por ser la principal causante de la reducción de la calidad de vida, daño y muerte para la mujer.

Otros estudios sitúan los malos tratos como la tercera causa de muertes prematuras y secuelas físicas y psicológicas en las mujeres, tras la diabetes y los problemas en el parto y por encima de las cardiopatías isquémicas y los accidentes de tráfico. De estos y otros estudios que aportan resultados similares podemos obtener las siguientes conclusiones:

1. Mientras más severo es el maltrato, mayor es el impacto en la salud física y mental de las víctimas.
2. Las consecuencias pueden persistir aun cuando el maltrato ya no se produce.
3. El impacto en el tiempo de los episodios violentos parece ser acumulativo.

Un modelo que resulta sumamente esclarecedor en relación con el mantenimiento de la relación de pareja en estas circunstancias es el del ciclo de la violencia, que postula tres fases en las que varían las respuestas que emite la víctima para tratar de sobreponerse a la situación traumática:

INICIO Y REITERACIÓN DEL MALTRATO

La víctima se va acostumbrando progresivamente al maltrato, manteniendo sin embargo la esperanza de que este cese en algún momento.

INTERMITENCIA

Los malos tratos van a ser cada vez menos predecibles, generalizándose a situaciones cada vez más diversas y provocando en la víctima la consolidación de la dependencia emocional de su pareja, en un intento de comprender lo que está sucediendo, así como la aparición de síntomas psicopatológicos.

MANTENIMIENTO DEL MALTRATO A LARGO PLAZO

La víctima va a resignarse, apareciendo con fuerza la desesperanza y lealtad adaptativa hacia el agresor como un mecanismo que le va a permitir controlar en parte el malestar que está experimentando.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), las principales consecuencias de la violencia doméstica para la salud de las personas que la sufren son las siguientes:

1. CONSECUENCIAS FÍSICAS

- Daño abdominal/ torácico.
- Trastornos intestinales.
- Hematomas y contusiones.
- Colon irritable.
- Síndromes de dolor crónico.
- Laceraciones y abrasiones.
- Discapacidad.
- Daño ocular.
- Fibromialgia.
- Reducción en el funcionamiento físico.
- Fracturas.

2. CONSECUENCIAS PSICOLÓGICAS Y CONDUCTUALES

- Abuso de alcohol y drogas.
- Baja autoestima.
- Depresión y ansiedad.
- Trastorno de estrés postraumático.
- Trastornos alimentarios y del sueño.
- Trastornos psicosomáticos.
- Sentimientos de vergüenza y culpa.
- Conducta suicida y autodestructiva.
- Fobias y trastornos de pánico.
- Conducta sexual insegura.
- Inactividad física.

3. CONSECUENCIAS SEXUALES Y REPRODUCTIVAS

- Trastornos ginecológicos.
- Disfunción sexual.
- Infertilidad.
- Enfermedades de transmisión sexual.
- Inflamación de la pelvis.
- Aborto inseguro.
- Complicaciones en el embarazo/aborto.
- Embarazo no deseado.

4. CONSECUENCIAS FATALES

- Mortalidad relacionada con el sida.
- Mortalidad maternal.
- Homicidio.
- Suicidio.

CONSECUENCIAS PSICOPATOLOGICAS

La violencia doméstica tiene una afectación bastante amplia en la salud mental de quienes son objeto del maltrato. Hay estudios que evidencias que alrededor del 60% de las víctimas van a manifestar estas consecuencias con un impacto en sus vidas que va desde moderado a grave.

Los más frecuentes y destacados problemas psicopatológicos que experimentan quienes han sido violentadas son los siguientes:

Síndrome de la mujer maltratada: en este síndrome se puede observar a una mujer víctima que minimiza su dolor, aumentando así su capacidad para soportar las situaciones adversas a las que le somete su agresor. Estas personas tienden a minimizar, negar e incluso presentar fugas disociativas, estas personas no solo presentan una afectación en su estado de ánimo y emociones sino también presentar incomodidades somáticas y en su relación con las demás personas.

Depresión: los síntomas propios de la depresión son directamente proporcionales a la intensidad y tiempo de duración de la violencia. La evolución de la depresión va a depender de como la victima interprete la situación y los recursos de los cuales disponga para modificar dicha circunstancia. Por ejemplo, si la victima siente o percibe que no podrá salir de la situación de maltrato, aparecerán en ella, además de la depresión, disminución en su autoestima, falta de motivación por cualquier actividad y limitaciones en su relación con las personas de su entorno. Sometida bajo este estilo de vida la victima va siendo cada vez más pesimista respecto a su futuro y a las posibilidades que tenga de salir de esta situación.

Trastorno de ansiedad: manifestado con fobias o trastornos específicos como son: la agorafobia, el trastorno obsesivo compulsivo (TOC) y las fobias específicas como resultado de asociar una situación amenazante con estímulos que recibió durante la agresión.

Trastorno de estrés postraumático: Aparece cuando la víctima ha sentido miedo, horror y/o impotencia frente a una situación que ha puesto bajo amenaza su vida o la de alguien más (según el Manual Diagnóstico y Estadístico de los Trastornos Mentales DSM-IV)

Este cuadro clínico se caracteriza por:

- Reexperimentación de la ocasión traumática, en forma de pesadillas, escenas en su mente y recuerdo que le son imposibles de evitar.
- Evitación de situaciones o lugares que le recuerden el evento traumático, incluso hacen lo posible por evitar hablar o pensar en el asunto.
- Activación o respuesta exagerada manifestada en irritabilidad, problemas de concentración, insomnio etc.

Lo anterior se puede presentar en victimas tanto de abuso físico como psicológico. Abuso o dependencia de sustancias: aunque no hay una asociación exacta con la prevalencia del consumo se sabe que predispone al consumo de alcohol principalmente.

Pérdida de autoestima: muchas veces al sentirse culpable por lo ocurrido, carecer de confianza en sí mismas, y falta de una red de apoyo, el nivel de autoestima de las victimas disminuye.
Cogniciones postraumáticas: aquí nos referimos a una alteración en la forma como las personas maltratadas perciben el mundo, a los demás y a ellas mismas.

Esta alteración las lleva a experimentar una falsa percepción de seguridad, a ser más propensas a un maltrato futuro, a culparse por lo sucedido, se vuelven más tolerantes a la violencia, dejan de creer en las demás personas y sienten que su vida o su existencia no tienen un significado importante. Lo anterior las hace menos “capaces” o dispuestas a buscar soluciones para salir de la situación.

Déficit en solución de problemas: como su nombre o indica, las mujeres maltratadas tienen menos tendencia para generar alternativas de solución, si lo hacen tienen menos posibilidad que estas sean efectivas, y en general una mayor dificultad para salir de situaciones apremiantes.


Inadaptación global:
esta inadaptación global se caracteriza por afectar su círculo social, familiar, laboral, así como su ámbito emocional.

Suicidio o ideas suicidas: una cuarta parte de los intentos de suicidio en mujeres son consecuencia de los malos tratos que reciben en su entorno familiar razón por la cual toman la fatídica decisión a no contemplar otra posible salida que ponga fin a su sufrimiento. Gran parte de las personas que recurren a ello han sido sometidas también a algún tipo de aislamiento.

Trastornos de la sexualidad: como es lógico, el estado psicológico y emocional influye en gran medida en el nivel de motivación y desempeño sexual que tengamos, siendo la pérdida de éste una de las consecuencias más frecuentes ya que todo cambia y se presentan, entre otros síntomas rechazo a cualquier encuentro sexual, dispareunia y anorgasmia.

Trastornos del sueño: generalmente causado por los altos niveles de ansiedad. Además de dificultad para conciliar el sueño se experimentan sobresaltos durante la noche los interrumpen el ciclo del sueño necesario, teniendo como consecuencia, un agotamiento que le impide a la víctima, desempeñarse de forma beneficiosa para sí misma.

Trastornos de la conducta alimentaria: pueden cursar cuadro como bulimia o anorexia, producto de la falta de apetito propia del miedo y de la pobre percepción de su autoimagen.

CONSECUENCIAS DEL AGRESOR:

Respecto a las consecuencias del agresor, según los datos aportados por diversas Administraciones Públicas, las principales consecuencias para el agresor son, cabe resaltar que en la gran mayoría de los estudios existentes en este ámbito se han centrado en las consecuencias que presenta la víctima, resultando sumamente complicado conocer las repercusiones en la salud mental que ésta tiene para el agresor.

Incapacidad de disfrutar de la intimidad con su pareja, esto se puede presentar debido a que después de un evento de agresión física, la pareja presente miedo o enojo, depresión y alguna consecuencia psicológica y/o conductual ya mencionadas anteriormente.
Riesgo de pérdida de la pareja, se ve con frecuencia, que la víctima llega a un nivel de distanciamiento o separación.
Riesgo de detención y condena: porque basándonos en el caso la pareja de juan lo denuncio a la comisaria de familia.
Sentimientos de fracaso, frustración y resentimiento.
Rechazo familiar y social:
Trastorno de control de impulsos. Disgregación de la conducta adecuada por parte del agresor un 45% sin control de los impulsos -donde hay episodios bruscos inesperados
Déficit de autoestima. Porque el daño es bilateral tanto como para la víctima como el agresor
Retraimiento social el agresor no tiene habilidad para la comunicación y por consiguiente poca autoestima
Depresión es un círculo vicioso porque el agresor presenta retraimiento social mencionado anteriormente además las constantes ideas de angustia e ideas por los problemas judiciales que pueden presentar
Trastorno de ansiedad es la búsqueda de estrategias opresivas para lograr su cometido (convertir en sumisa a la víctima).
Suicidio secundario a la depresión y la ansiedad.